Visita (Kiren y Mateo)

Kiren salió y tardo unos pocos minutos para volver a entrar, cuando me dispuse a salir del camerino con él, Kiren ya lo hizo sin esperarme y tuvo un breve encuentro con el jefe, no tardé en alcanzarle, antes de salir a escena pude alcanzarle.

- ¿Planeas.....algo? - le pregunté intrigado, desde que volví del baño parecía otro completamente

Kiren sonrio picaramente.

-"Solo hacer que el jefe gane mas y mas dinero aqui"-le respondio mientras se soltaba de el y se subia a la barra, comenzando a moverse al ritmo de la musica. Inmediatamente invito a dos hombres del publico a que se subiesen a bailar con el, mientras lanzaba significativas miradas a Mateo. Queria ponerlo celoso...

- Vaya vaya......con que no permitía que nadie le tocada ¿eh? - murmuré para mís adentros, me crucé de brazos y me mantuve observando la escena, Kiren se movía más eróticamente que nunca y aquellos dos parecían babear por él, era extraño pero me sentía desplazado, aún así me repuse y continué viendo aquel espectáculo aunque me extrañaba que no fuera conmigo sino con dos clientes.

Uno de los clientes le apoyo las manos en las nalgas. El primer impulso de Kiren fue darle un manotazo y alejarlo de su cuerpo, pero recordo la mision que el mismo se habia impuesto, y se froto mas contra las palmas del hombre. El otro empezo a pasar los dedos por su pecho, internando su mano en la semiabierta camisa del pelirrojo.

Vaya, eso sí que era extraño, uno de los clientes se agarra a sus nalgas y primero le aparta con violencia para luego dejar que lo haga, aquellos dos le estaban manoseando y de vez en cuando me lanzaba miradas sugerentes, como queriendo que reaccionara de alguna manera. Acaso.......¿me estaba queriendo poner celoso? Esbocé una sonrisa, yo no era una persona celosa y él podía hacer lo que quisiera con quien quisiera pero.....de todos modos quise complacerle de modo que me lancé al escenario y le aparté de aquellos dos para bailar eróticamente junto a él.

- Así que queriendo ponerme celoso, ¿eh? - susurré en su oído mientras hacía señales a los otros dos para que se bajaran

Kiren sonrio cuando Mateo se puso a bailar con el. Entonces comenzo a moverse aun mas eroticamente, y acaricio su pecho con pasion, deshaciendose del chaleco vaquero que cubria esos hombros, besandolos con ansiedad.

-"No me digas que no te has puesto aunque sea un poquitito celoso, Matty"-le dijo asignandole ya un diminutivo. Lamio su menton de forma juguetona. Deseaba que se hubiese puesto celoso, deseaba que quisiese que le perteneciese, porque eso significaria que en el fondo aun tenia esperanzas de que se enamorase de el.

Sonreí mientras desnudaba mi torso, al parecer aquella noche iba a haber sesión doble, una de ellas frente al público. - Mmm...quizás un poco - murmuré con una sonrisa pícara para besar sus labios de nuevo - pero por lo que veo parecías encantado por ello, Kiren.... - lo arrimé a mí agarrándole de las nalgas - dime....¿te sientes preparado?

-"¿Preparado para enseñarles a todos estos clientes como satisfacer a un hombre? Creo que siempre estare preparado para eso, y mas si es contigo..."-le dijo con una sonrisa, apartando las manos del torso de Mateo y dirigiendolos a su propia camisa, la cual fue desabrochando seductoramente mientras rozaba su cuerpo ardiente contra el de su compañero.

- Espera, deja que te ayude.... - agarre su camisa y la desgarré con ambas manos haciéndola trizas para comenzar a atacar su cuello y sus pezones con gula, mordisqueándolos y deslizando intensamente mi lengua por todo su cuerpo semidesnudo.

- Eso es..... - susurré en su oído - tengo una sorpresa guardada en el bolsillo - dije para sacar la corbata roja que me regaló Kaine, sujeté sus muñecas en alto y las até con aquella cinta de tela y éstas a la barra donde quedó sujeto frente a mí, le sonreí lujurioso y volvía besar sus labios intensamente

Kiren sonrio mientras el otro lo ataba. Esta intensamente excitado, y la situacion contribuia aun mas a que el calor de su cuerpo se intensificase. Lo miro con los ojos brillantes por el deseo, ansioso por saber que iba a hacerle.

-"¿Que tienes planeado para mi, querido Mateo"-le pregunto con lujuria.

Retiré sus pantalones con la misma facilidad pero sin desgarrarlos, tan sólo tiré de ellos para que Kiren quedara completamente desnudo ante mí, y lo mismo hice con mis pantalones, ambos estábamos desnudos ante el público y mi compañero inmóvil en la barra.

En un rincón había preparada una caja para cuando se dieran estos espectáculos, fui hacia ella y saqué un dildo de látex de un tamaño medio pero aún así considerable.

- Parece que al público le gusta Kiren, le gusta ver a uno dominar por completo a otro... - susurré en su oído mientras deslizaba la punta de aquel "juguete" por sus labios - ¿sigues preparado?

-"Soy todo tuyo Mateo... Haz lo que quieras con mi cuerpo, el y mi alma te pertenecen..."-le dijo pasando seductoramente la lengua por el juguete que sostenia sobre sus labios. Estaba preparado apra cualquier cosa que Mateo decidiese, fuese lo que fuese lo haria... Y mas sintiendo el desbordante placer que lo embargaba en esos momentos de completo deseo.

Le había atado de tal manera que pudiera voltearlo a gusto y así lo hice, ahora mi compañero me daba la espalda y me arrodillé para masajear sus nalgas y contemplar su entrada, con el dildo comencé a acariciar aquella zona para luego penetrarle con él con firmeza, ya estaba la zona algo dilatada de la sesión anterior y lo hizo con suavidad. Moví el dildo de forma rítmica para que fuera penetrándole cada vez más profundamente, quería arrancarle algunos gemidos antes de ser directamente yo el causante de ellos.

Sintio como le daba la vuelta y como introducia en su interior el dildo, sintiendo el placer recorrer cada celula de su cuerpo. A medida que el objeto se movia dentro de el, se sentia estremecer y al mismo tiempo sentia el deseo que despertaba en el Mateo. Lo necesitaba, necesitaba sentirlo... Pero reconocia que hacer juegos preliminares tampoco estaba tan mal.

-Aaaahhh...-gimio en voz alta, ya que era lo unico que su garganta podia articular.

Sonreí pues me apasionaba que gimiera de aquella manera. Mantuve aquel "juguete" en su interior y bajé las ataduras haciendo que su cuerpo quedara en ángulo recto. Volví a sonreirle y besé sus labios de nuevo para comenzar a deslizar mi miembro erecto en sus labios sin llegar a penetrarle, quería que siguiera él el ritmo.

- Venga Kiren, volvamos a crear arte, vamos a hacer que vuelvan a follar como la otra vez - susurré mientras acariciaba sus cabellos

Beso la punta de su miembro con deseo, lamiendola despues con la lengua una y otra vez. Despues, sin poder contenerse, se lo metio por completo en la boca, empezando con una succion lenta pero increiblemente placentera, moviendose sobre el miembro de Mateo con lujuria, y sintiendo como con ese vaiven se sentia aun mas el dildo en su interior.

- Mmmm...eres genial, Kiren.... - gemí mientras Kiren felama mi miembro con maestría, me mantuve en aquella posición durante unos minutos moviendo ligeramente mis caderas para entrar y salir lentamente de entre sus labios.

Volví a retirarme y di la vuelta para volver a su entrada y mover ligeramente aquel "juguete" que pernanecía en su interior, lo retiré un poco pero no del todo y comencé a penetrarle con mi propio miembro para intruducir de nuevo el dildo en su lugar original.

Como suponía, la gente ya comenzaba a masturbarse y a realizarse mutuamente felaciones, no tardarían en comenzar a follar de nuevo.

-Mmghh...-gimio un poco adolorido debido a la doble penetracion. Nunca le habian hecho nada asi, pero entre todo el dolor se distinguia algo de placer; comenzo a mover sus caderas en cuanto sintio que su interior ya estaba preparado para recibir los dos miembros, tanto el de mentira como el de verdad-. Mmmm... Aaaahhh...-gemia suavemente. Veia a su alrededor como el publico comenzaba a reaccionar ante el espectaculo, y sonrio satisfecho.

Retiré de una vez aquel dildo dejándolo en el suelo para ser yo el único que tomara a Kiren a partir de ahora, me retiré de él durante un momento y volví a ponerlo de pié y de frente a mí, cogí sus caderas he hice que sus piernas se enroscaran en las mías antes de volver a penetrarle de nuevo y besar sus labios apasionadamente, ahora empezaba lo bueno.

Sintio como sacaba el juguete de su interior, y su cuerpo se estremecio al sentir unicamente el miembro de Mateo. Se aferro con fuerza a sus hombros, dejando que oleadas de placer lo recorriesen de la cabeza a los pies. Los besos apasionados de Mateo lo elevaban al paraiso, y sintio que en ese momento, podria morir de felicidad... aunque se dijo a si mismo que no moriria hasta que no hubiese obtenido su amor.

No tardé en eyacular en el interior de mi compañero acompañado de un sonoro gemido seguido de jadeos - Shh...aguanta Kiren....tienes que....firmar.....la obra - pues de nuevo la sala era una bacanal enorme. Desaté a Kiren y le sujeté mientras comenzaba a masturbarle de cara al público.

- Mmmm.....he disfrutado mucho esta noche, ¿sabes? - susurré

-"Yo... Tambien, Matty..."-musito en su mente volviendo a emplear el gracioso diminutivo. Sintio el hormigueo en su estomago y en seguida se corrio ante todos los clientes, algunos de ellos se derramaron al mismo tiempo que el, y otros se lo quedaron mirando admirados unos segundos para luego llegar al orgasmo. Kiren sonrio satisfecho, dejandose caer.

Como la otra noche....volví a tenerlo en mis brazos y lo llevé de vuelta al camerio mientras le besaba una y otra vez, abrí la puerta y lo tumbé sobre el sofá para colocarme sobre él y penetrarle de nuevo, aún sentía deseos de más y así se lo hice saber.

- ¿Seguimos en privado? - susurré con lujuria en su oído comenzando a embestirle de nuevo

-Ummmm... Aaaahhhh...-gimio quedamente-. "Despues de esto acabare agotado..."-musito en su mente, aunque no se resistio a una nueva sesion privada, mas bien rodeo con sus piernas las caderas de Mateo para profundizar aun mas la penetracion-. "Te amo Matty..."-le dijo, aunque sabia que el jamas le responderia con algo similar. Lo beso suavemente en los labios, una y otra vez de manera tierna.

- Yo.... - susurré - me preguntaba si....si deseas que cambiemos las tornas - volví a besarle - me gustaría que me tomaras.....pero...sólo si lo deseas, si te sientes...dispuesto - terminé por decir mientras continuaba mis embestidas, al fin y al cabo sus razones tenía para negarse.