Escondido...

El muchacho permaneció con los ojos cerrados un instante después de haber salido del agua y notar el aire en su piel. Respiró por si mismo para después sujetar el rostro del vampiro con ambas manos, separándole de él y mirándole arqueando una ceja.

-¿Siempre te aprovechas de la situación?-le preguntó antes de dirigirse a la orilla, saliendo del agua a penas para sentarse con las piernas aún dentro del agua-. Vaya...-murmuró el muchacho mientras el agua del cabello seguía resbalándole por el rostro, observando todo aquella estancia con esa luz mágica-. Es tan... grande y tan hermoso que asusta-comentó sonriendo después, extasiado por las vistas.

El muchacho miró al vampiro y alargó un brazo hacia él, cogiéndole de la mano.

-Te agradezco que me hayas traído. Es un lugar increíble.

-Solo cuando lo merece…

Tomo la mano que el muchacho le ofrecía, entrelazando los dedos, y posesionándose frente a el, entre sus piernas, besando la frente del chico con una extraña dulzura….

-Me alegra que te agrade pequeño… ¿Sabes? Generalmente lo hermoso y el miedo van más ligados de lo que parece…

Le sonrío pícaro, enseñando sin pretenderlo los colmillos entre sus carnosos labios…

-Algo de eso tengo escuchado-comentó mirándole a los ojos un momento antes de fijarse en sus colmillos-. ¿Siempre los tienes?-le pregunto apoyando el dedo índice en su labio inferior y atreviéndose a meterlo después lo sificiente como para rozar uno de ellos con suavidad, volviendo a mirarle a los ojos.

En esos momentos algo desvió la atención del muchacho. Giró la cabeza de inmdiato hacia un lado, tratando de ver algo en la tierra húmeda. Se estiró con rapidez a un lado, echando las manos al suelo como si hubiera visto algo importante y lo hubiera perdido al mismo tiempo. Por un instante pareció ser una alimaña subterránea, reptando por el suelo y urgando en la tierra hasta que dio con lo que parecía estar buscando.

-Eh... mira lo que eh encontrado...-dijo como si de pronto volviera a la normalidad. Metió la mano en el agua para limpiarla de la tierra y sacó de nuevo una pequeña gema de color ocre, sin ningún valor en apariencia pero que desde el primer brillo había llamado su atención.

Sintió su dedo en la boca, y mas que de morderlo le dieron ganas de acogerlo entre sus labios y lamerlo…pero se contuvo

-Mas o menos…siempre son más largos que los vuestros pero cuando tengo extrema sed o voy a morder…se alargan más…

Observo al pequeño rebuscar entre la tierra sonriendo al ver lo que hallo, tomándolo entre sus manos un instante, mientras le acariciaba suavemente el cuello a el…

-Es ojo de tigre, una gema semipreciosa…esta ruta esta plagada de diferentes tipos…

Se quedo pensando un instante sonriéndole al muchacho…

-¿Me la prestas hasta mañana?

Sonrío algo aniñado, mordiéndose los labios incluso…realmente estaba disfrutando con todo aquello…

El chico escuchó su breve explicación y después frunció levemente el ceño agarrándose las manos mirando aquella pequeña piedra.

-Mmm... deacuerdo, pero... acuérdate de devolvérmela-le dijo mirándole un momento con algo de nerviosismo-. Quiero tenerla... ¿qué harás con ella?-le preguntó entonces mirándola de nuevo, viendo de nuevo aquel extraño brillo inexistente que parecía sólo estar para él y el había llamado tanto la atención.

-No seas impaciente pequeño…mañana a la noche la tendrás… ¿A que hora sales del club? Podría llevártela entonces…si quieres claro…

-Blando y encima va y se me vuelve tierno el guerrero…la próxima vez, poseo a un ratón en lugar de a ti, de seguro será mas divertido…8954946681756411 elefantes se balanceaban sobre…

-De seguro seria mejor para ambos…dios después de esto no querré volver a ver un elefante en mi vida...

Apoyo su frente en el pecho del menor, sintiéndose demasiado agobiado a causa del tremendo dolor de cabeza que le estaba causando…

-Casi al amanecer-aclaró el chico antes de mirarle un momento y observar como se apoyaba sobre su pecho-. ¿Sigue doliéndote la cabeza?-le preguntó pasándole una mano por los cabellos, acariciándole la frente con suavidad-. ¿Por qué te tortura de esta manera? ¿No tiene suficiente con tenerte poseído y vivir de ti?

El muchacho torció el gesto y después tiró de Darah para sacarlo del agua y hacer que se sentase a su lado, mirándole encandilante y pasándole la mano por el rostro, como si estuviera cuidando algo con mimo.

Se quedo sorprendido por ese trato, pero decidió dejarse hacer, le agradaba el calor del pequeño, poso su mano en la que le acariciaba, dándole un suave beso en la palma, mirándole mientras no cesaba de deslizar sus dedos por esta…

-Es así…y prefiero que lo pague con migo que con cualquier otro, además, mi conciencia es lo suficientemente fuerte como para tenerle preso, de haber poseído a otro, el seria el dominante del cuerpo y no su ente…entonces, te esperare a la salida…¿te parece?...

El chico le miró un momento a los ojos y solto el aire de los pulmones con suavidad, dándose la vuelta y quedando sentado de espaldas al agua, al lado del vampiro.

-Eso significará que volverás para verme mañana-dijo con una suave sonrisa mientras miraba a su alrededor lentamente-. Entonces me parece bien-concluyó mientras se apoyaba sobre él y le rodeaba el toso con un brazo.

Sonrío levemente acariciándole los cabellos al pequeño...

-Si nos veremos mañana, pero esta noche no ha terminado aun…

Se inclino levemente, rozando los labios por su mejilla descendiendo hasta la boca del menor, dándole un leve mordisco, tentándolo a que le acogiera…

Bal aceptó aquello como un nuevo beso, apoyando una mano con suavidad en su rostro y besándole con suavidad, sin miedo.

-¿Haces todo esto por alguna razón en particular? Nadie me había tratado así con tan poco tiempo conociéndonos.... ¿No te preocupa que sea yo en realidad una criatura del averno que puede destruirte de un momento a otro?-le preguntó sonriendo y apartándole el flequillo con el dorso de los dedos.

Enarqueo una ceja ante ese comentario, poniendo de pronto una falsa cara de asustado…

-Ohhh si estoy aterrado, por favor no me comas nooo…

Se rió a carcajada limpia, haciendo melodrama hasta que de pronto, se inclino de nuevo hacia el, besándole con pasión incluso algo desesperado, mordiéndole el labio levemente, y apoyando su frente en la del otro con los ojos aun cerrados…

-No lo se…no se por que me agrada tanto estar con tigo…puede que por egoísmo, por que eres hermosos, aunque creo que la mas acertada…es…por que me agrada en sobremanera tu calor…

No habría los ojos, y se había sonrojado levemente, seguramente a causa de la vergüenza que le causaba haberle confesado aquello

Sin embargo al se sintió alagado, e incluso había notado la necesidad de preguntarle algo más pero guardó silencio, pasándole las manos por las mejillas.

-Tu también te pones rojo-dijo de forma inocente sonriendo-. Pero si es por egoísmo... supongo que no me importa, porque a mi también me agradas-el chico parpadeó un momento y después ladeó la cabeza sin dejar de mirarle-. ¿Crees que podrías llegar a quererme algún día?-le preguntó como si nada, con la más absoluta de la normalidad.

-Eso depende, de si me dejarías conocerte, si dejarías que llegara a amarte, de ser así, la respuesta…es si…

Dijo muy bajito suspirando y mirando el agujero por donde pasaba la luz de la luna…intentando contener demasiadas cosas a la vez…

-Y dime Bal…¿me amarías?¿Dejarías que yo lo hiciera?

Murmuro aun con la mirada perdida, mas por miedo a la respuesta que por cualquier otra cosa…

El chico le miró un momento en silencio y después desvió la vista a lo lejos, al fondo de la caverna.

-Quizás-contestó tímidamente encogiéndose de hombros-. ¿Qué podría impedírmelo? Aunque nunca he salido bienparado de este tipo de cosas... ¿Cuidarías de mi si eso llegara a pasar?-le preguntó con un tono animado y alegre volviendo a mirarle otra vez con una sonrisa fresta y aniñada.

Darah le miro, cogiendole en brazos, para que quedara sentado en su regazo y apoyado sobre su pecho…

-¿No lo estoy haciendo ahora?

Musito simplemente, acariciando su mejilla y besando sus cabellos con dulzura…

El muchacho rio abrazándose a su cuello y apretándole con fuerza durante unos sengundos antes de separarse con las manos en sus hombros.

-Quizás si, pero como no se cuales son tus intenciones... deberás confesarme un secreto para obligarme a cuidarlo y para que estés pendiente de mi. Así me aseguraré de que no huyes después de haberme manoseado todo lo que has querido...-comentó arqueando una ceja y mirándole a los ojos-. ¿Te parece un buen trato?

Darah enarqueo la ceja también mirándole algo extrañado…

-Para empezar…tú también manoseaste a base de bien…y para continuar… ¿Qué secreto quieres que te cuente? Ya conoces mi debilidad por el helado…

Dijo sonriendole en broma...

-Ah, vamos, eso no es serio...-dijo. En realidad era bastante poco serio y no pudo evitar sonreír al evocar aquella noche en la que le pidió el helado-. Me refiero a algo de lo que sientas necesidad por ocultar al mundo porque crees... que pueden utilizarlo en tu contra en algún momento... Por dios todopoderoso magnífico y sexy que seas tienes que tener algo así, no me digas que no-insistió el chico.

Lo de dios, lo tenia claro, todopoderoso, no cabía duda…pero que el menor le llamara…

-¿Sexy?...Mm... interesante cuestión…

Suspiro un instante, observando al pequeño acariciándole los cabellos…

-Te he confesado mas cosas de las que debía, y mucho mas importantes de las que crees…mi verdadera debilidad…esta entre todas ellas solo tienes que rememorar…

El chico le miró un momento, sereno y respirando con tranquilidad.

-¿Crees que lo que se... me vale para algo más que para plantearme que algún día encuentres algo más importante de lo que ocuparte que de verme cada noche porque te agrada mi calor?-le preguntó llevando inconscientemente una mano a la de Darah mientras acariciaba su cabello, guardándola un momento bajo sus finos y suaves dedos-. Además, eso no cuenta, está fuera del trato que estamos haciendo ahora-dijo entonces alzando la voz.

Sonrío travieso alzándole el mentón para que le mirara a los ojos…

-Créeme…mi vida podía estar en peligro después de todo lo que te he contado…

El muchacho frunció el ceño para nada convencido.

-Bueno, está bien. Pero que sepas que no debería contar...-se quejó largando un suspiro con suavidad-. Supongo que vale así-dijo después apoyando la barbilla en el cuello del vampiro, cerrando los ojos con los brazos al rededor de su torso, apreciando la suavidad y la calidez ajena pegadas a él.

-Cuenta mas de lo que crees…

Le abrazo…llevándolos a ambos de nuevo a la calidez del arrollo, con el pequeño cogido en brazos, acunado contra su pecho…

-Esto es agradable…¿Verdad?…

Para el era la gloria…sintiendo al menor contra el mientras el agua les bañaba…

-Lo es. Quizás vuelva a este lugar otra vez por mi cuenta... cuando tu no me veas-dijo sonriendo con suavidad con los ojos aún cerrados.

Después de un rato dejándose mecer, podía notar todo su cuerpo en armonía con aquel lugar. Por alguna razón que desconocía el estar de aquel modo, bajo tierra, le resultaba muy reconfortante. El planeta entero le protegía en aquellos momentos el exterior.

-Yo... estoy formando un ejército-dijo de pronto con voz suave-. Un ejército de guerreros.