El Inicio de mi Eternidad en Eternity (privado)

Eidrien se acomodaba el cabello por enésima vez, el bendito gesto que tenia cada que se ponía nervioso o se exasperaba, se pasaba un blanco mechón de cabello tras la oreja y es que al fin había llegado el día en que le toco "sentar cabeza" adiós a sus juergas y sus vagabundeces, sus andadas por el mundo y sus exploraciones donde se perdía en la selva durante días, no podía creer aquello, sabía que Darah le cobraría el "favorcito" algún día pero con un demonio no de aquella manera, su "relación" siempre había sido retroalimentativa, pero no, el amo y señor tenía que haber sacado viejas cuentas y cobrárselas todas, el problemas era que el vampiro no estaba acostumbrado a estarce quieto en un solo sitio, y menos por el resto de la eternidad, y su "adorado" amigo era un bastardo cruel, que pensaba restregarle en la cara que le tocaba quedarse por el resto de la eternidad en "Eternity", por ello iba el nombre del campus??, o estaba paranoico, o necesita pagarla con alguien; se masajeó la sienes apoyándose de espaldas a su escritorio y suspiró, ni modo, el daño estaba hecho y ya solo le tocaba "sobrevivir", pensaría en algo luego, ahorita la prioridad era ponerle algo de orden a aquel desastre, claro que sus pertenencias no eran muchas, oh no claro que no, nada más su biblioteca personal que constaba de varias docenas de estantes hasta el techo y ni hablar de su armario, Darah le había advertido que nada de su "montón de basura" pero no pudo evitarlo y ahora se ahogaba en el desastre y no sabía por dónde empezar a acomodar.


Decidido ya, se dió la vuelta para encarar su desastre cuando escuchó algunos golpeteos en la puerta, si era Darah le iba a mentar la madre, de otro modo no se le ocurría quien podía ser, pero otras cosas mas importantes merecían su urgente atención y así,ataviado con su camisa blanca de vestir y un pantalón gris, se arremangó las largas mangas hasta el codo y sin siquiera voltear a ver al extraño le invito a pasar.-Adelante.-se inclinó tomando una caja llena de libros del suelo encaminándose hasta uno de los dos estantes que tenia ahí para empezar a ordenar, restándole importancia a quien sea que tocara...

Después de mucho meditarlo, había decidido ir a pedir el puesto de profesor de Defensa y Supervivencia en la escuela de la ciudad, sabia que hacia poco todos los profesores habían muerto en una reunión, al ser atacados por el propio director, al parecer a aquel ser no le sentaba bien la mezcla de Luna llena y sangre y cuando uno de los asistentes se corto…bueno era de esperar…lo peor de todo es que tenia claro que el nuevo director era un chupasagre…y eso iba a ser un gran problema para su “relación” de trabajo, aunque tampoco tenia intención de conversar mucho con el.

En un principio no iba a ir a pedir el puesto, tenia pensado intentar soportar lo que fuese…y eso incluía el alimentarse a base de pan y agua un par de semanas…el podía soportarlo estaba claro, pero su pequeña hermana Melissa…no estaba acostumbrada a ello…por ella, aguantaría tener que pluriemplearse, ya fuera siendo uno de los cazadores mas famoso de la ciudad, como tener que trabajar para un entupido chupasangres…

Respiro hondo, desabrochándose el primer botón de su camisa que ya le estaba ahogando, no le agradaban esos chismes, prefería una camiseta normal o simplemente nada…llamo a la puerta, y cuando le dieron permiso, paso con el rostro alzado, y mostrando aquel porte innegable de guerrero…

-Hola, Mi nombre es Ien, me han comentado que debo venir aquí para presentarme ante el director…

Miro con aquellos intensos ojos azules al hombre frente a el, sabiendo al instante, que el era el director y que por supuesto era un vampiro…

-Eh?.-contra todo pronostico las palabras del muchacho frente a él captaron su atención, no sabía para que tenia que venir a presentarse ese muchacho, un estudiante? Su secretario? Un profesor? Pero no se supone que tendría una reunión con ellos luego? Se suponía que su personal estaba completo no?, suspiró bajando el rostro un instante, muchas preguntas y nadie quien las contestase, ni siquiera tenia algún informe o algo que le diera una pista de cómo había funcionado el campus hasta entonces, Eidrien estaba completamente perdido en aquel asunto, quizá no era el mas indicado para el puesto sin mencionar claro que él no es que estuviera muy de acuerdo con el cargo pero después de ser prácticamente obligado a aceptarlo ya no había marcha a atrás.

Miró de arriba abajo al rubio detallándolo un poco, fijándose en esas linda orbes azules que le miraban altaneros y se atrevería a decir que con un dejo de desprecio, el peliplata sonrió con malicia y autosuficiencia, quien se creía el mocoso ese?, si, mocoso, le llevaba mínimo unos 275 años .- Oh, así que presentarte.-dijo con su habitual tono de voz, caracterizado por ser bajo y cortes aunque a veces lleno de sensualidad, picardía, sarcasmo o hasta malicia.- bueno es un placer Ien, mi nombre es Eidrien Bethlen el director obligado del campus, me alegra que hallas tenido la cortesía de venir a presentarte pero no me has dicho en concreto para que.-lo de “obligado” más bien lo había pensado. Eidrien era vampiro, no adivino, no había manera de que supiera el porque real de la presencia del muchacho en su despacho, claro que podía suponerlo pero la vida le había enseñando que jamás debía dar las cosas por hecho basándose en una simple especulación, se hallaba sentado sobre su escritorio con los brazos cruzados al pecho y el rostro impasible, mirando al muchacho sin verlo, revisando unos papeles como si fueran la cosas mas interesante del mundo aun sin saber ni “ñ” de lo que iban estos, todo menos prestarle la atención al chico, que según él, no merecía. Definitivamente no tenía paciencia con humanos de ese tipo.

Ien frunció el ceño ante el tono altanero de Eidrien…apretando los puños con fuerza en un intento de contener las ganas de irse de ahí

-"No…por ella he de aguantar, no puedo alimentar a una niña de 15 años a base de pan y agua…"

Pensó mentalmente intentando hallar una razón para no patearle el culo a aquel…”hombre”

-Disculpe Mi mala educación…Soy Ien Mac Cumail…y me dijeron que viniera aquí, para presentarme a reclamar el puesto como profesor de Defensa y Supervivencia, escuche que hace poco…hubo un pequeño accidente, y todos los profesores quedaron…indispuestos por decirlo de algún modo…

Dijo todo aquello con una claramente falsa sonrisa en sus carnosos labios…y es que ya le costaba mantener calmado su tono de voz, como para encima tener que estar lamiéndole el culo a aquel vampiro…

Al oír lo del "pequeño accidente" el peliplata se digno por fin a mirarle interesado, después de todo sus suposiciones no estaban tan a alejadas de la realidad, y ciertamente estuvo tentado en hurgar en la mente del muchacho para enterarse al menos de que había pasado con todo el personal, solo que por “educación” Eidrien no acostumbraba a usar esa habilidad a menos que la situación realmente lo ameritara, es decir, en un caso extremo o por voluntad de la persona, de lo contrario era su “habilidad dormida”; suspiró, perfecto, ahora estaba sin profesores y tenia que venir a enterarse por un humano, del cual sin conocerlo, ya se estaba cansando.

Se suponía que para darle el puesto de profesor a alguien tenia que saber sus habilidades, si estaba lo suficientemente capacitado para el trabajo o no, o por lo menos eso deducía; lanzó la carpeta de escritorio y se bajó de este de un salto, auscultando al chico con la mirada para con los brazos cruzados pasear a su alrededor, deleitándose con su figura descaradamente, claro que todo eso lo hacia solo para fastidiarlo, no sabía porque pero le estaba gustando exasperar al muchacho, por otro lado si lo mandaba Darah no tenia ninguna duda de que merecía el puesto, aunque evaluando su contextura tampoco era que necesitaba mucha información.- Que te hace optar por el puesto?.-preguntó como si nada.-Es decir, no puedo dártelo así no más sin siquiera conocer tus habilidades o que experiencia tienes en la rama, no sé si me entiendes.-continuó dejando de darle vueltas al chico y volviendo a recostar la cadera del frente de su escritorio esperando la respuesta de su aspirante.

Ien estaba con todos sus sentidos atentos, no le gustaba que le “rondaran” de ese modo, se sentía como la presa y a el le gustaba ser el cazador…
Apretó los puños con fuerza conteniéndose de nuevo, cosa que no solía hacer con facilidad…

-Yo, soy el un cazador, mi familia lleva generaciones con este oficio, siempre hemos sido los mas venerados y a pesar de que ahora tan solo quedamos mi hermana Melissa y yo, seguimos siéndolo…

Retiro la mirada un instante, dándose cuenta de cuanto había menguado su familia, su padre murió frente a el, a manos de un entupido vampiro, que masacro una aldea entera por pura codicia, por saber si simplemente podía hacerlo…pero una sonrisa macabra se dibujo en su rostro al recordar lo lentamente que había muerto ese ser a sus manos…le arranco todas sus extremidades…una por una, y lo dejo que casi muriera de in animación por falta de sangre durante tres meses...

-Créeme tengo experiencia…y además muy buena…

Dijo algo altanero sin perder esa cruel sonrisa de sus labios…mirando a Eidrien como si no fuera más que una presa a la que dejaba escapar por gusto…

-Venerados? Vaya, entonces dudo que estés capacitado para este trabajo, aquí solo eres un profesor más, nadie te venerara solo encontraras a un montón de muchachos a los que tendrás que enseñar y evaluar, punto.-espetó con frialdad observando a Ien con superioridad, cruzándose de brazos a la espera de la reacción del humano, cualquier retrechería y ni que soñara con pisar el campus de nuevo, si iba a estar ahi lo que le restaba de vida por lo menos se iba a hacer lo que decía sin discución, no iba a aceptar malcriadeces de nadie y menos de un simple humano como el que tenía enfrente que solo sabe dios que demonios se creía para plantersele así.

Cualquiera que lo viera diría que ese no era él, Eidrien podía ser muy molesto cuando quería pero generalmente odiaba las peleas e intentaba no relacionarse mucho con la gente y cuando lo hacía no era precisamente para armar una guerra, solo que ya molestar a ese chico se estaba convirtiendo en un enfermizo placer que no se iba a negar, y eso que tan solo llevaban media hora conociéndose cuando mucho.

-No te equivoques Eidrien…que me veneren no quiere decir que sea necesario…tu me pediste referencias y ahí las tienes…¿Quién mejor para enseñar Defensa y Supervivencia que alguien que trabaja de ello?...

Seguía apretando los puños por la rabia hasta el punto de clavarse las uñas y hacerlo sangrar las heridas…sonriendo malicioso por ello…seria interesante si el chupasangres le daba por tener hambre…así le podría demostrar como de cualificado estaba para el puesto…

Primero que nada, que hacía el mocoso tuteándole?, vaya falta de educación, humano tenía que ser, el director no tenía nada en contra de esa raza pero desgraciadamente ese ser le estaba hartando, al parecer el chico le tenía un odio desmedido, le era insoportable la presencia del peliplata o tan solo era ideas suyas?, si todo aquello solo se lo imaginaba debía sufrir de paranoia extrema, aún así, con todo y todo Eidrien no pretendía llevarse mal con su personal, lo único que quería era poder marchitarse en paz dentro del campus, era mucho pedir?. Por otro lado y volviendo al tema del rubio, ciertamente y según se acaba de enterar, no tenía personal, quizá le faltaba hasta el que limpiara las escaleras, definitivamente como para ahorcar a alguien, el asunto era que tenía en frente a un hombre solicitando el puesto de profesor de Defensa que parecía estar en condiciones optimas como para desempeñar el cargo y según le dictaba la lógica debía conseguir a los educadores faltantes en el menor tiempo posible y era ahí donde entraba su sentido común que le repetía hasta el cansancio "Por que no contratarlo?!!!",dió un respingo intentando sacar paciencia de donde no tenía, no podía creer lo que estaba a punto de decir.-Quizá tengas razón muchacho.-dijo con suavidad pareciéndole realmente irónico que le dijera "muchacho" cuando él mismo parecía menor que el contrario, volviendo a perder la cabeza entre un montón de carpetas que tenía justo debajo de él que según tenía entendido era como un pequeño manual para los nuevos profesores de Eternity, normas y algunos formularios de datos, decía pequeño pero en realidad eran unos cuantos cientos de hojas que ameritaban una dedicada revisión, o eso le haría creer.


Tranquilo se encontraba, aún recostado de el enorme inmueble cuando el olor familiar del liquido que en sus primeros años le volvía un animal le pegó de lleno en la nariz, sí, el mismo que fluía por la venas de todo ser viviente alentando los latidos de su corazón, aquel que en ese momento podía hasta saborear pegado de su paladar ahogando a sus papilas gustativas con su metálico sabor, poniendo todos sus sentidos alertas, sintiéndose un tanto inquieto; ya había "comido" pero sencillamente el aroma del vital liquido era algo que muchas veces le ponía "ansioso", en sus años, que aunque no eran muchos de algo había servido, aprendió como controlar esa ansiedad tan inoportuna que muchas veces se le presentaba en publico, teniéndole ya un poco de resistencia, podía contenerse hasta encontrar el lugar adecuado para alimentarse y es que por mucho que odiara ese lugar no y no!! se iba a alimentar de ningún ser viviente que habitara dentro de los limites de Eterniy, punto final, así fuera el mismísimo zoquete que tenía en frente, era su norma personal él podía ser vampiro y estar condenado a matar para vivir pero tampoco era un asesino, el arrebatarle la vida a alguien no era algo que le causara algún tipo de placer ni nada parecido, de hechos sus primeros años se había rehusado a beber sangre pues no podía con el remordimiento y aunque ya no ocurría lo mismo seguía fiel a sus principios, los demás podían decir misa, pero él no asesinaba a sangre fría. Cerró los ojos y respiró profundo, intentando inducir dos segundos de "laguna mental", mordiéndose un poco el labio inferior con sensualidad para luego abrirlos y con una sonrisa tranquila, dar dos largos y veloces pasos al frente, entregarle las carpetas a Ien y dirigirse tras su escritorio hasta una esquina del salón a paso apresurado pero sin parecer desesperado, sacando un termo de una de sus cajas, su apreciadísimo té de limón que aunque no le gustaba nada de nada, teniéndole en principio un gran asco a este, negándose a beberlo y ocasionándole muchas veces unas nauseas interminables, ahora era distinto, se había convertido en parte de su "comida", que no sabía como pero le quitaba las ansias de sangre en momentos tan inoportunos como ese, borrando de su mente y su paladar el sabor metálico del vital liquido.


Sirvió una taza degustando el aroma que despedía el brebaje, dando un lento sorbo sin olvidar sus modales y toda la educación que había recibido alguna vez, pareciendo un hermoso caballero ingles tomando su té; paladeo un segundo el potaje llenándose del alivio buscado para recordar que no estaba solo.-Quieres un poco?, tranquilo no es ni veneno ni sangre, té de hierbas, te apetece?.-le ofreció amablemente al rubio con una sonrisa que parecía hasta dulce, ya se le habían quitado las ganas de pelear, Eidrien cuando quería podía ser medio bipolar, nunca se sabía que pensaba ni mucho menos con que saldría y esa era una de las veces donde su humor había dado un giro de trescientos sesenta grados.

Ien entorno un poco los ojos al percatarse de que el vampiro se estaba conteniendo…

-Tengo que decirlo…admiro tu decisión…no todos los tuyos aguantarían el aroma de la sangre de un guerrero…

Se llevo la mano a la boca…lamiendo los pequeños arañazos para que estos dejaran de sangrar…

-No gracias…estoy servido…

Musito medio en broma medio en burla…apoyándose en la pared con los brazos cruzados sobre su pecho…rememorando lo que había dicho el vampiro de que quizá tuviera razón…

-¿Eso quiere decir que el puesto es mío?...

No pudo evitar que se le notara el entusiasmo en la voz…claramente necesitaba el trabajo…no podía criar a Melissa así, aunque eso implicara pluriemplearse por el día y la noche…

El peliplata sonrió con el borde de la taza aún en los labios, soplando un poco para enfriar el humeante brebaje.-No me admires, no tengo ninguna culidad especial si obviamos mi raza, solo no soy un animal que anda mordiendo el primer pedazo de carne que se le atraviese, sin ofender claro.-observó como el muchacho se llevaba la mano a la boca para lamer las pequeñas heridas que tenia en esta y al detallar lo carnoso y rosados de aquellos labios se le antojó algo que no era precisamente sangre.- "Carajo Eidrien".-pensó reprochanose asi mismo aquella actitud, no era propio el director el colegio andar por ahí fijándose en los profesores y menos en uno que parecía odiarle y lo peor de todo es que no entendía por qúe.


Se encogió de hombros al escuchar la negativa de Ien y siguió sorbiendo, parecía un nene pequeño con la taza agarrada con ambas manos por los lados, cerró los ojos un instante, la ansiedad desaparecía, su pulso, su corazón y sus colmillos volvieron al estado natural en el que siempre debieron estar, con su fin logrado apartó el potaje de su rostro, colocándolo en un porta vasos sobre el escritorio de roble...


-Jejeje tu que crees??.-le preguntó con una los finos labios curvados en un linda sonrisa pícara que le daba un aspecto por demás aniñado, con sus turquesas orbes fijas en el profesor.

Se encogio de hombros ante lo de “pedazo de carne”

-Para mi sois animales…para vosotros nosotros mero alimento…si tu no te ofendes…yo tampoco…

Había escuchado cosas perores de otros vampiros y seres nocturnos…aquello era un halago en comparación…
Se fijo en todos y cada uno de los movimiento de Eidrien atento y alerta…no podia evitarlo esa era su naturaleza…había estado tanto tiempo a la espera de un ataque que ahora seguia haiendolo en presencia de cualquier nocturno…

Suspiro mordiendose los labios ante aquella pregunta…no le agradaba que jugaran con el de ese modo…pero le miro con sus orbes de oceano, aferrandose a toda su paciencia…

-Espero que se un si…no me agradaria haber perdido el tiempo…

Sinceramente ante la frase del muchacho le provocó decirle "Ah pues es un no, ahora te jodes, dudo que te guste trabajar con un animal como yo" ponerle la sonrisa mas cínica que saliera e irse para dejarlo ahí botado, pero estaba bien, eso se ganaba por intentar ser amable con un pinche humanucho como ese, es que el único mortal con cerebro de la faz del planeta era Gabrielle?.

Le dedicó una fugaz mirada de odio al mocoso, como queriendo traspasarlo con esta, paciencia señor, paciencia; aunque, por otro lado, podría ser interesante, era como un juego, un reto, le enseñaría al rubito de cuarta ese que vampiro no era sinónimo de animal, bestia salvaje, o asesino cruel ni nada parecido porque por lo menos él no pidió ser lo que era ni tenía culpa de los traumas de Ien, por un segundo sintió tristeza por el muchacho y ese sentimiento fué precisamente el que lo impulsó a no buscarle guerra y es que si algo odiaba el peliplata en la vida eran las peleas, detestaba tener que gastar sus "valiosas palabras" en insultos e improperios hacia otra persona que solo estaba ahí porque andaba tan o mas jodido que él, en resumen era una manera bastante patética de malgastar la vida.-Si, es un sí Ien y justo el "pequeño fajo" de carpetas que tienes en tu mano es lo que necesito que lees, llenes, revises y firmes para poder hacerte el contrato.-pero no se iba a ir liso, la venganza aunque pequeña era dulce, poco le importaba si al nuevo profesor le agradaba o no la idea de haber perdido el tiempo pero él siendo otro lo hubiera mandado al infierno y que ni se atreviera a pisar el campus de nuevo por altanero, pero sin embargo ahí estaba dándole el trabajo que no le quedaba duda, necesitaba.

Ien levanto el rostro al escuchar las palabras de Eidrien…y sin poder evitarlo…le sonrío…mostrándole la dulce esencia de niño que aun escondía en su interior…se mordió los labios una vez mas…extasiado y feliz por haberlo logrado…
Pero de pronto pareció rememorar con quien estaba, así que se irguió y carraspeando retomo su compostura…aunque sus oceánicos ojos seguían mirándole con un cierto brillo…

-Gracias…te lo agradezco de veras…si…me dices que he de rellenar, te lo traeré mañana mismo…

Le hablo con tranquilidad y una rara educación dirigida al vampiro, pero en su mente resonaban otras palabras…

-Bien…yujuuuu…genial…wiii…ala jodete vampirito…vas a tenerme rondándote todos los días…wiiiiii…tengo trabajo...tengo trabajo…y uno en el que no me lesionare diariamente wiiiiiii…

Parecía un nenito mentalmente hablando…pero le agradaba tanto haber hallado ese puesto que no podía evitarlo…incluso en sus labios torno a desdibujarse una pequeña sonrisilla…

El director se sorprendió de sobremanera por la reciente y desconocida reacción de su nuevo profesor, aún así le devolvió una sonrisa amable en respuesta, pensando que en realidad aquel hombre quizá no era tan pedante e insoportable como parecía, cuando sus cavilaciones fueron interrumpidas por el pensamiento del muchahco que resonó en sus timpanos como si se lo hubieran gritado al oido, subiendo la mirada enseriendose por completo su expresión, perfecto, error, si era un pelmazo el tal Ien... Que desperdicio nombre tan precioso para semejante humano tan retrecehero, pedante, inmaduro e insoportable, como podía sacarle de quicio de esa manera una persona? jamas le habia caido mal alguien apenas verlo, dios lo intentaba, estaba intentando llevarse bien con él pero el rubio siempre hacía algo que le jodía los esfuerzos y estaba a punto de sacarlo de su despacho de un puntapié..


-Si, lo que sea, tienes que llenar todo, todo lo que esta ahi, no te dí basura ya te dije que tienes que leer y llenar cuanto papel se te atraviese en esa carpeta y depende de para cuando quieras el contrato lo traes, claro que quieres esperar a que alguien mas te quite el puesto puedes traerlo cuando quieras, yo no tengo ningun problema con eso.-espetó con una sonrisa burlona, él tambien podía ser un perfecto idiota..

Ien miro el montón de carpetas que había en la mesa, abriendo mucho los ojos…al darse cuenta de que esa noche, iba a tener que pedir a alguien que le sustituyera en su turno de guardián…resoplo pasándose la mano por sus doradas hebras…mirando de pronto a Eidrien con una adorable y falsa sonrisa…

-No te preocupes directorcillo…mañana a las primeras horas de sol, tendrás todo rellenado, si quieres, podemos quedar en una terraza o algo para conversar de todo…

Se acerco a la mesa cogiendo todas las carpetas y quedándose como pensativo…

-Hay no perdona…que no puedes…

Dijo golpeándose con un dedo la frente, como haciéndose el olvidadizo…

-Pues no se... te llamo y nos vemos en otro lugar…¿Vale Vampirito…? Bye…

Hizo un gesto con la mano en señal de despedida y salio por la puerta…decidido a rellenar todas y cada una de las carpetas…

-Oh encantado quizá tambien podamos reunirnos con unos amigos mios, haremos una cena fabulosa pero tenemos problemas con el suministro de sangre, te invito cordialmente, tal vez nos podrías ayudar con eso.-le guiñó un ojo pícaro mientras en su sonrisa lasciva se dibujaba un pequeño y puntiagudo colmillito con el que se rompió el labio inferior y procedio a lamer la sangre que se escurría por todo el belfo, regándola primero con su lengua para despues saborearla y limpiarla con la misma, de manera sensual e insinuante sind ejar de verle...

-Bye.-dijo con tono fingida y asquerosamente risueño a punto de comer a fuerzas y dejar sin una gota de sangre al imbecil ese, y con estos pensamientos su ansiedad volvió....

A él nadie podía obligarlo a estar donde no quería y mucho menos a soportar a gente como aquella, se iría y mandaría todo a la mierda, al diablo con Darah que vea que hacía con su pinche campus, mientras le estaba le estaba haciendo un favor al darle el trabajo a ese muerto de hambre y asi le pagaba? vaya mal agradecido, pero se las cobraría de algún modo lo haría. Se dirigió tras el escritorio y furioso tiró todo lo que estaba encima de este al suelo con fuerte manotazo que destrozó todo y tomando su chaqueta de una silla cercana salió hecho una fiera dando un portazo que descolocó las bisagras, necesitaba cazar...


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ESCENA TERMINADA
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